¿Qué ha cambiado en los diez años del papa Francisco?

CR El Papa de los procesos, el Papa de abrir camino, el Papa de los posibilismos. Es una de las definiciones que se puede hacer del papa Francisco. El 13 de marzo cumplirá diez años de su elección. Hemos preguntado a varios expertos cómo se concreta esta mirada de Francisco. ¿Qué ha cambiado (o no) el papa Francisco en esta década? Justo en la semana que se cumplen diez años de la renuncia de Benedicto XVI, el 11 de febrero de 2013, iniciamos, con esta descripción de la mirada del Papa y sus actuaciones más visibles, una serie de artículos para hacer balance de estos 10 años de pontificado.

Por otro lado, este 21 de febrero, el Observatorio Blanquerna de Comunicación, Religión y Cultura organiza una mesa redonda con motivo de la década del pontificado de Francisco. El acto, que cuenta con la colaboración de Catalunya Religió, tendrá lugar a las 18:00 h en el Auditorio de la Facultad de Comunicación y Relaciones Internacionales de la Universidad Blanquerna-URL y contará con la participación del obispo auxiliar de Barcelona Sergi Gordo; el corresponsal de Antena 3 en Roma, Antonio Pelayo; y la directora del Osservatore Romano en español, Silvina Pérez.

La mirada del papa Francisco

MÍRIAM DÍEZ –CR Una vez escogido, Jorge Bergoglio abandonó su severa mirada. No lo hace expresamente, le salió, por gracia de estado. El papa Francisco acota muy directamente a los ojos. Y ahora lo hace de forma afable. Ser Papa te cambia, como ser presidente o rey. Algo inexplicable actúa. La gracia, llamamos los creyentes. Y en el caso de Francisco, la actuación es triple. En los gestos, palabras y mirada. Gesticula porque es argentino e italiano, y con sus manos dice cosas. Vehemencia, determinación, fuerza. Los gestos no son sólo las expresiones que realiza con las manos. También nos referimos a acciones papales inusitadas. Es el Papa que ha puesto duchas en la plaza de san Pedro. Es el Papa que se fue a vivir a Santa Marta con otra gente, dejando las estancias papales. Es el pontífice que no acude a Castelgandolfo. Es el Santo Padre que deja audios simpáticos en los móviles de la gente. Es un Papa que parece que no pueda andar, pero que corre como una gacela, eclesialmente hablando.

Con la mirada transmite empatía y acogida. Pero si no está a gusto, su mirada también es muy reveladora, como la de los niños pequeños. Sin embargo, allí donde es más evidente su esencia es en sus palabras. Sobre todo las que pronuncia sin guión. Pero también hay que prestar atención a discursos y escritos, donde él sabe que lo que está escrito, perdura y acciona palancas hacia fuera que eran necesarias. El Papa de los procesos, el Papa de abrir camino, el Papa de los posibilismos, no es un alocado pontífice que dice lo que le pasa por la cabeza sin contexto. Cuando él habla es consciente de que es el Papa. Y por eso lo hace.

Míriam Díez es directora del Observatorio Blanquerna de Comunicación, Religión y Cultura y vicepresidenta de la Fundació Catalunya Religió.