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Catalunya Religió
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Roger Vilaclara –CR La Jornada de Budismo en Cataluña, que organiza la Coordinadora Catalana de Entidades Budistas (CCEB), se ha centrado este año en el paso de los años y la conciencia del tiempo. La de este domingo ha sido la decimotercera edición de esta iniciativa y se ha celebrado en el espacio Torre Jussana de Barcelona. Con casi un centenar de participantes inscritos, se constata que el budismo vive un "momento dulce". "Pero esto no debe llevarnos a banalizar nuestra religión", dice Glòria Puig, presidenta de la CCEB, en conversación con Catalunya Religió durante la jornada.

El paso de los años y el envejecimiento son temas "muy interesantes a tratar desde el budismo", asegura Puig. De las jornadas, subraya la idea de "no adelantarse a las cosas que no sabemos si van a pasar". "Tampoco debemos quedarnos anclados en el pasado y en la idea de que todo funcionaba mejor antes”, dice. Las presentaciones del día han remarcado la importancia de "saber que a cada paso, estás en el aquí y ahora".

"LAS JORNADAS DE BUDISMO SON UNA OPORTUNIDAD ÚNICA PARA ENCONTRARSE E INTERCAMBIAR OPINIONES"

A lo largo del día, los participantes han podido vivir y escuchar hasta 6 presentaciones diferentes sobre el sentido de la vejez y el valor de hacerse mayor. Se han hablado temas como el miedo al envejecimiento, la vejez como elemento clave en el camino del Dharma, el arte de hacerse mayor o el acompañamiento. También ha habido espacio para una pequeña representación sobre las crisis de las décadas desde la perspectiva budista. Tras el almuerzo y una "caminata consciente", los participantes se han dividido en seis espacios diferentes donde se han realizado debates diversos. Las jornadas han terminado con un concierto de Albert Oliveres y la presentación de las conclusiones de los seis grupos de debate.

Para Puig, las jornadas sobre budismo en Cataluña son "una oportunidad única para encontrarse e intercambiar opiniones". Con las jornadas, "vemos que hay diferentes formas de abordar los mismos puntos del budismo". Es una forma, explica, de ver "la diversidad dentro de la unidad".

La de este año la han preparado conjuntamente todas las entidades budistas de Cataluña que han querido participar. La temática de la jornada se escogió a través de una votación entre todas las asociaciones. "Cualquier tema se puede tratar desde el budismo", reconoce Glòria Puig.

La valoración de la jornada "es muy positiva", asegura la presidenta de la CCEB. "Las 90 personas inscritas demuestran que la gente tiene ganas de encontrarse y hablar del budismo", explica. En la misma línea y sobre el budismo en Cataluña, explica que su religión "vive un momento dulce". "Hay músicos, famosos y artistas que practican budismo y que lo dicen abiertamente", ha explicado. Sin embargo, todo tiene su parte buena y su parte mala. "La parte mala es, cuando hablamos de budismo, caer en la banalización", concluye.

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