Pasar al contenido principal

Comentario en la primera lectura del domingo 17 durante el año. A.

El primer libro del Reyes dedica nueve capítulos (3-11) al reinado de quien fue rey de Israel, Salomón. Lo hace con un gran optimismo, recreándose en las excelencias del reinado más próspero que tuvo Israel en toda su historia. En un momento del relato el narrador explica que “El rey Salomón superaba a todos los reyes de la tierra en riqueza y sabiduría. De todas partes venían a verle para escuchar la sabiduría que Dios le había infundido” (10,23-24). En el antiguo Oriente Próximo todos los soberanos se montaban su propia historia escrita naturalmente por su gloria y para provocar la admiración de los súbditos. Se hacían una lista de las magnificencias de su reinado que ni una brizna de sombra podía enturbiarlas y se grababan en estelas, columnas, paredes de los palacios, templos y monumentos funerarios.

El consenso mantenido durante mucho tiempo sobre Salomón y su reino defendiendo que fue señor de un gran imperio y una época de grandes construcciones y esplendor político y cultural, cada vez ha sido más cuestionado. Su nombre no es mencionado en ninguna fuente documental extra bíblica. La arqueología no atestigua ninguna época de gran esplendor cultural y las grandes construcciones atribuidas a la época salomónica en Hassor, Meguidó y Guèzer fueron, con toda probabilidad, construidas con posterioridad.

Los reyes de Babilonia y Asiria pedían a sus dioses larga vida, seguridad nacional, un ejército invencible que les permitiera la derrota de todos los enemigos, grandes riquezas y la prosperidad del país y un poder estable y de larga duración. Sorprendentemente Salomón no quiere nada de eso sino que pide a Dios que le dé sabiduría. El Señor concede a Salomón lo que le pide y no sólo sabiduría sino también riqueza y prosperidad. Es lo que leemos en la primera lectura de este domingo (1Re 3, 5.7-12).

Los capítulos del 3 al 11 del Primer libro de los Reyes pueden leerse como el cumplimiento de la promesa de Dios hecha en Salomón. Podemos observar varios tipos de sabiduría. Hay un tipo de sabiduría que podríamos calificar de política y social. La encontramos en los capítulos 5 y 10 y hace referencia a la organización administrativa del reino, a las relaciones y tratados internacionales y al intercambio cultural entre el que sobresale la conocida y famosa visita de la reina de Saba (10,1-13) ). Otro tipo de sabiduría es la que podríamos calificar de enciclopédica. Ésta se nota cuando el redactor del texto da noticia de los conocimientos que Salomón tenía sobre plantas y animales (5,9-14). Otro tipo de sabiduría es la ligada a la construcción del templo. Cabe recordar que a la construcción del templo el autor le dedica una parte muy extensa (6-8) de los capítulos 3-11. Por último está la sabiduría jurídica. Si alguna cualidad debe ser propia del rey es administrar con justicia. Es una cualidad propia del rey ideal. Esto es lo que pide el orante del salmo 72, curiosamente atribuido a Salomón y que parece un calco del reino descrito en 1Re,3-11: “Dios mío, da al rey tu derecho, dale tu rectitud. ¡Que gobierne con justicia tu pueblo, que sea recto con los humildes!” (Sal 72,1-2). La descripción gráfica de lo que dice el salmo y de la sabiduría jurídica de Salomón la encontramos en el episodio de las dos prostitutas que ambas reclaman ser la madre del hijo vivo (3,16-28).

Como ha podido verse el texto bíblico se recrea al magnificar la sabiduría de Salomón rozando casi la desmesura. Una sabiduría que sobrepasa las sabidurías de todos los tiempos y todos los lugares tanto es así que sabios y reyes vienen de todas partes para escucharla (10,1-13). La sabiduría de Salomón se ha convertido en referente en la literatura bíblica que le hace autor de Proverbios, Cántico de los cánticos, Sabiduría y algún salmo. La literatura apócrifa extra bíblica lo hace autor de los Salmos de Salomón y las Odas de Salomó. El reconocimiento de su sabiduría llega hasta el Nuevo Testamento: “La reina del país del sur... vino del otro jefe del mundo para escuchar la sabiduría de Salomón” (Mt 12,42).

Pero de poco le sirvió tanta sabiduría, a finales de sus días Salomón se abandonó a los dioses extranjeros iniciando la trayectoria idolátrica de la mayoría de los reyes de Israel y Judá que acabaría con el trágico final del exilio en Babilonia.

Domingo 17 durante el año. 30 de Julio de 2023.

Temàtica

Us ha agradat poder llegir aquest article? Si voleu que en fem més, podeu fer una petita aportació a través de Bizum al número

Donatiu Bizum

o veure altres maneres d'ajudar Catalunya Religió i poder desgravar el donatiu.