(Ramón Bassas / David Casals - CR) "Somos muchos más de los que nos creemos". Esta ha sido la conclusión del Segundo Foro Catalán de Teología y Liberación, que se ha celebrado este fin de semana en los recintos de la Escuela Pía de Nuestra Señora, en pleno Eixample barcelonés, y que ha reunido a medio millar de personas según la organización.
El encuentro pretende ser la sección catalana del Forum de Teología y Liberación de ámbito mundial. Se convocará otro para el 2014 y ahora, en estos próximos meses, la tarea es que en toda Cataluña se vayan organizando, en diferentes localidades, otros pequeños Foros.
Uno de los testimonios más emotivos ha sido el de 'Juanito', un hombre que vivía en la calle y que fue recogido por el 'Padre Paco', Francisco García, un hombre que ha creado una fundación para acoger a los 'sin techo'. Es un ejemplo de la liberación y la manera de entender la vida, la gestión pública y el compromiso personal que propugna el Forum, y que tiene lugar cerca de casa.
Desde la organización, Enric Canet explica que el Foro no pretende ser una entidad más de las que hay en Cataluña en el ámbito de las diferentes tradiciones religiosas, sino quiere ser un movimiento que agrupe a todas las que están en defensa de la tradición y el progreso.
Por todo ello, se han hecho varios talleres. Había organizados por entidades católicas de base, pero también ha habido espacio para las religiones minoritarias: Iglesia Evangélica de Cataluña, musulmanes e incluso agnósticos entre los asistentes.
El manifiesto recalca que hoy en día, las entidades católicas y de otras tradiciones de base ponen un fuerte acento en la acción: justicia social, educación, sanidad, etc. En un mundo como el actual, en plena crisis económica, hay mucho trabajo por hacer. Ahora bien, se tiende a no explicar otro: lo que se hace, comunicarlo, y explicarlo bien, tanto a nivel interno como a los medios de comunicación.
El texto se dirige a todas las personas que "buscan raíces en el interior de cada uno, que buscan el sentido de la vida, lo que les sobrepasa, lo que les da sentido, lo que toda persona busca y a lo que cada cultura o religión pone un nombre diferente ".
En este sentido, se hace un guiño hacia el movimiento de los 'indignados': "La ola de que otro mundo es posible empieza a invadir el planeta", concluye el manifiesto, que destaca también la riqueza que supone la dimensión trascendente del ser humano" vivida desde abajo ".
En total, se han hecho unos sesenta talleres, muy participados, con gente de diversa edad y procedencia.
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