El Ambón: Visión Nocturna

HOMILIA-B-SANTA MARIA, MADRE DE DIOS (Lc 2, 16-21)

Hace poco, mi compañero Álvaro nos explicó que al Gihembe Refugee Camp de Ruanda los chicos tienen que estudiar de noche y que, al no tener electricidad, deben hacerlo con unos lotes frontales que recargan con una dinamo a pedales . ¿Os imagináis funcionar así? Nos concentraríamos mucho más para que el haz de luz proyectado por el frontal limitaría nuestro campo de visión en el área iluminada. Fuera de esta aura, sólo oscuridad. Veríamos menos cosas pero las veríamos más claramente.

Quizás es por eso que los pastores reconocieron al Salvador de noche. De noche se les apareció el ángel y el estallido de su anuncio iluminó la oscuridad. De noche se pusieron en camino y de noche lo vieron en un pesebre, iluminado por un haz de luz divino. María «guardaba todo esto en su corazón y lo meditaba" de noche, porque es de noche que el Señor «ilumina su rostro sobre nosotros y nos hace ver la luz de su mirada», como nos asegura la famosa bendición del libro de los Números.

Hay cosas que sólo se ven de noche, una vez los ojos se han acostumbrado a la penumbra. Qué importante es acostumbrar los ojos a la penumbra! Qué importante es desarrollar una cierta visión nocturna! Wilde escribió De Profundis en penumbra y en la cárcel. En condiciones similares, San Juan de la Cruz había compuesto, cuatro siglos antes, la Noche oscura del alma. Y nadie ha descrito mejor el espíritu de nuestro tiempo que Novalis en sus Himnos a la noche. Ha intentado trabajar de noche? Parece que los pensamientos fluyen más ágiles y se produce un silencio que no podemos encontrar de día.

Dios nos pensó para el día, para la felicidad diurna, para la vida en plena luz ... pero yo estoy seguro que nos creó de noche.

(El ambón es una recopilación semanal del blog "La homilía del Marc")