(CR) El vicario delegado del Opus Dei en Cataluña, Antoni Pujals, se ha sumado al reconocimiento de la decisión de Benedicto XVI, "una renuncia razonada y meditada que manifiesta una vez más su gran altura personal, de hombre que actúa siempre con libertad interior siguiendo su conciencia, por encima de las demás consideraciones".
Antoni Pujals destaca que el legado de Benedicto XVI es "un magisterio extraordinario" en el que "prácticamente no hay cuestión actual sobre la que no se haya pronunciado con valentía y profundidad. Hay que destacar, pienso, su énfasis en el sentido de lo sagrado, en la liturgia, que nos trae la presencia de Dios".
El vicario delegado del Opus Dei sitúa este momento como un tiempo de agradecimiento a lo que ha supuesto el pontificado de Benedicto para la Iglesia y el mundo y anima a" rezar, invocando especialmente la ayuda del Paráclito para el futuro Romano Pontífice".
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