Encuentro de Superioras Mayores, Delegadas Abadesas y Priores de Cataluña

En esta ocasión nos hemos reunido 30 religiosas y hemos iniciado la jornada con una oración, animada por la hermana Mireia Galobart, pidiendo el don de la fe y uniéndonos de este modo a la convocatoria del Año de la Fe y el Sínodo de la Nueva Evangelización.

El encuentro nos invitaba a reflexionar y encontrar desde la fe un nuevo impulso para la evangelización. Dar un vistazo a la historia para valorar la creatividad profética de la vida consagrada femenina. Ver cuáles son los retos de futuro y cómo dibujar los nuevos horizontes de la vida religiosa femenina en el siglo XXI.

El hermano marista Lluís Serra, secretario general de la URC, nos hizo una cuidada presentación y desarrollo del tema, animándonos a redescubrir nuestro propio espacio y a no perder nuestro oficio profético para poder dar respuesta aquí y hoy, en nuestra sociedad individualista y centrada en el yo, donde a menudo no queda espacio para los demás, ni para el Otro, y cómo debemos vivir la historia para dar respuestas históricas.

En el diálogo comentábamos que es un tiempo de gracia, un volver allí donde la obra de Dios se forja en la oscuridad, un tiempo de gracia para que la realidad nos ayude a redescubrir lo esencial, y que nos hace falta, desde la fe, permanecer creativas con paz, caminando con esperanza, recuperando el sentido total de la misión, explicitándola, siendo portadoras de la Buena Nueva, desde nuestra experiencia de seguimiento de Jesucristo. Lluís Serra nos animaba a hacer un discernimiento, como si fuéramos directoras de un museo de arte contemporáneo y quisiéramos hacer una inversión para adquirir el cuadro de lo que es verdaderamente esencial en la vida religiosa.

Todos los actos se realizaron con un buen ambiente de fraternidad y la alegría de compartir. Después de comer la hermana Priora, a quien queremos agradecer su acogida y disponibilidad, nos invitó a hacer una visita al monasterio.