Réplica al teólogo Pié sobre el derecho a decidir

1. Salvador Pié escribe "El riesgo de un nuevo integralismo católico y el derecho a decidir". Cabe d ecir al teólogo y rector de Santa María del Mar que la Doctrina Social de la Iglesia y el derecho a decidir no son ningún riesgo para la convivencia libre y democrática de los ciudadanos y de los pueblos. Por el contrario, el riesgo es impedir el ejercicio del derecho a decidir.

2. El artículo es parcial porque el autor sólo hace referencia a una de las partes de este debate cívico, político, ético y cristiano. Se refiere con prevención a los soberanistas catalanes, especialmente a los católicos soberanistas catalanes. Afirma hasta cinco veces, ¡cinco !, que corren el riesgo de mantener una postura no ajustada a la doctrina eclesial. No es así. La postura de los católicos favorables al derecho a decidir respeta en síntesis dos puntos. Primero: la Doctrina Social de la Iglesia, los documentos pontificios y de los obispos catalanes defienden los derechos de las personas y de las naciones como Catalunya. Segundo: todas las opciones políticas (unidad de España, federalismo, confederalismo, soberanía de Catalunya) son legítimas siempre que se propugnen de manera pacífica y democrática.

3. El artículo es impreciso cuando se refiere a la opción soberanista de personas y de grupos católicos catalanes. El autor habla de hace "cierto" tiempo, "varias" entidades, "sus" autores, "algunas" organizaciones, "algunos" movimientos, "algunas" formulaciones". Y así hasta nueve veces. Criticar de manera generalizada y ambigüa es una mala práctica. Sobre todo si se hace desde un púlpito, aunque sea de un diario. Las cosas deben ser dichas por su nombre. Claro y catalán.

4. El artículo también es parcial porque Pié no se refiere en ningún momento a los sectores unionistas ni a los católicos soberanistas españoles. Se ve que estos no corren ningún riesgo de equivocarse. No cita ni critica los documentos de contenido nacionalcatólico de la Conferencia Episcopal Española aprobados con el voto, entre otros, del arzobispo Carlos Osoro y los cardenales Antonio María Rouco y Antonio Cañizares. El episcopado español aún defiende que la unidad de España es un bien moral. Es decir, no aceptar la unidad española es inmoral. Y ésto es nacionalcatolicismo.